A lo venezolano
”Sin permiso, ni perdón”

Se ha vuelto costumbre entre los venezolanos las malas mañas en actividades del día a día que ya nadie parece sorprendido ante los malos hábitos del vecino, para ejemplificar este planteamiento quisiera hacer mención acerca de una situación común como bien lo es el traslado en el metro de Caracas, que se ha convertido más bien en una carrera de no quien llegue primero sino quien llegue como pueda sin importar quien se encuentre ante nosotros, sin permiso ni perdón, con tal de que las puertas del vagón cierren con uno adentro, todo es válido.


En virtud de lo anterior se hace obvio mencionar que uno de los tantos problemas que afronta Venezuela no se trata de cuán rojito o cuán azulito seas, es simplemente una cuestión de valores y un poquito de sentido común, es saber hacer lo correcto a pesar de los intereses que uno bien pueda tener ante una situación determinada, es el poder pedir permiso para hacer camino ante una multitud, es el simple hecho de hacer la cola para esperar tu turno, es el acto de cooperar con el país si ante un área verde no se permite tirar basura, es dejar la viveza y respetar las reglas, normas y leyes que están estipuladas.


Asimismo, me gustaría agregar que no se trata de aprovechar un momento para hacer lo que mejor nos conviene sino más bien reconocer esos momentos para hacer lo correcto, aunque a veces la sociedad puede que margine este tipo de conductas y nos incite a hacer lo contrario. Aunado a ello no sólo basta leer las normas, no es el hecho de aprenderse de arriba a abajo la constitución para reclamar nuestros derechos, es también saber cumplir los deberes.


Por último este artículo no se trata sobre quién tiene el mando el gobierno, ni cómo éste ejerce su mandato, se trata de Venezuela, pues ésta no es sólo de aquellos que poseen autoridad sobre otros, Venezuela es de todos aquellos que sepan valorarla y hacerle honor a través de hechos y no palabras.

Laura Marcano
13-02-08